Padre: hijo, ¿eres feliz?
Hijo: si padre,¿y tu?
Padre: Soy feliz
Cuando dije esto, sentí que no, no sentí la fuerza de la palabra que lleva al sentimiento...
Padre: hijo, no me siento feliz al decir que soy feliz
Hijo: mmmm
Padre: ¿crees que me falta algo?
Hijo: te falta el orgullo al decir que sos feliz con esta vida.
Hay que estar orgulloso de si mismos, por la historia que escribes cada segundo, en cada latido del corazón.