Sombra de Sangre-Capitulo 3

Sombra de Sangre

Capitulo 3

El primer rayo de sol que se filtro en el bosque fue el motivo por el cual Lisbit se encontraba despertando a Hefesto.
-Alli en la mesa tienes el desayuno y mientras tanto te cuento los planes.Le comentaba ella.
-Lisbit, ¿Has dormido bien?, tienes unas grandes ojeras- Añadió Hefesto
-Si y no.. ya te vas a enterar el porque.

Hefesto se levanto y camino hacia la mesa donde se encontraba su desayuno. A la vez se llevo una gran sorpresa.
- ¡Guau! que brillante quedo mi armadura. Exclamaba emocionado.
- Y le agregue una capa nueva, Caballero de la Orden de Sangre. Respondió la muchacha.
-Esta muy bonita, gracias, no debiste hacerlo.
- Si  debía hacerlo, porque lo que tenemos que hacer depende ahora mismo de los dos.
-¿Que planes tienes? Orion ven a escuchar.

El gran lobo se acerco a la mesa y sentó su gran cuerpo en el piso.

-Ya prepare todas las provisiones para el gran viaje. Primero debemos salir del bosque y encontrarnos con un viejo amigo, estoy segura que él sabrá algo sobre tus compañeros de la Orden, quizás alguien haya sobrevivido.
- Pero... tengo que ir a buscar, algo.. que se llevaron.
-A la princesa lo se.- Exclamo Lisbit
-¿Como..?.-Sorprendido
-Un día lo sabrás... y la respuesta va a estar en donde te dije que vayamos primeros.

Hefesto tomo su armadura y se la coloco, blandió su espada, examino su filo y la guardo.
Lisbit se puso su capa, un cuchillo escondido entre sus botas, y un palo pequeño, en uno de sus bolsillos de la capa.

-El palo que guardaste, no tiene efecto para defenderte... a menos que sean ratas.-Dijo Hefesto curioso.
-¡Ya! eres un impaciente Hefesto.. ya todo lo vas a conocer a su momento.-
-Deja de ponerle tanto misterio a las cosas- con tono de broma.


Lisbit, Hefesto y Orion, dejaron atrás el hogar, y salieron con la fría brisa de una mañana de invierno, acariciándole la piel, camino hacia la salida del bosque, para encontrarse con el viejo amigo de la muchacha.