Se dice que antes dormía en una habitación la princesa
Jisin que fue raptada por el hechicero aprendiz del rey maldito que vivía en el
norte, en un castillo subterráneo debajo de las montañas, cuenta la historia que
este rey era un gran mago, conseguía lo que él quería, pero lo que no pudo
obtener fue las tierras que se extendían mas allá de su reinado, su ejército arrasó a grandes ciudades,
grandes batallas se asomaron en los muros de ellas, el hechicero ideo un plan
para negociar con el país más rico del continente, con Lisponia. Para eso,
necesitaba raptar a la princesa más deseada por los reinos, el maldito había
negociado con su padre, este lo negó
pero luego de que el maldito se marchara, le dijo a su fiel amigo que si seguía
habiendo más muertes, no le quedaría más opción que mandar a su hija a esas
tierras plagadas de bestias horribles. La doncella desde su escondite en un
pasadizo que se encontraba en su habitación escucho todo, entre lagrimas
pensaba que sería mejor que vaya con el rey maldito, porque sabía que igual iba
a ser llevada quieran o no, espero en su habitación a que llegara el momento,
presentía que sería la hora, cuando entro una persona a medianoche, con una
capa oscura, poseía una mirada profunda, no demostraba ningún temor alguno, sentimientos
u otro estado, su cara tenía una impresión neutra, su cabello blanco lo hacía
más misterioso, este se acerco a la princesa sigiloso y le pidió que no emita
sonido, que no le haría daño, ato las
manos de la princesa y desapareció en
segundos luego de pronunciar unas palabras, La misión fue llevada a cabo por el
gran aprendiz Karic, que en el camino de vuelta, fue conociendo a la princesa,
de la cual se enamoró. Sabia las intenciones de su señor que tenia con la
princesa, asique todas las noches antes de dormir cuando acampaban, observaba a
la muchacha dormir y pensaba como salvarla, pero no podía conseguir mucho, su
corazón estaba manchado de magia, magia negra, no podía hacer un bien a
alguien, cuando llegó al palacio de su amo y entrego a la carnada, el rey
maldito comenzó a tratarla muy mal, fue llevada a un calabozo, sin comida, sin
agua, y a veces los guardias de ese lugar, la escupían y le pegaban. El
aprendiz no soporto ver lo sucedido, tanto sufrimiento, verla a ella le
producía una sensación, no quería admitirlo, pero sentía amor, sentía los
poderes de la luz, había desaparecido los sentimientos que su padre, el rey, le
enseño. Una noche el muchacho se escabulló en el calabozo, no fue tan difícil
ya que los guardias estaban borrachos. Se encerró con ella en el calabozo y le
empezó a hablar de lo que hasta entonces, sus sentimientos le demostraron,
también le conto la importancia de su sangre para el rey, que la princesa nunca
había sabido de eso, a lo que ella le contesto, -hechicero, si tanto me amas,
tienes el valor para matarme, el rey, tu padre, como has dicho me usará para
destruir el mundo, y no es lo que deseo, mi corazón late por la luz, y no por
ver sufrir todo lo de mi alrededor, mátame, y bebe mi sangre, salva el futuro-
luego comenzó a sollozar. –mi amor- dijo el hechicero- no llores, reuniré
fuerzas para volver a verte, obedeceré tu pedido, solo porque te amo y durante
el camino, me has enseñado mucho de tu corazón- La beso con pasión, le seco las
lagrimas y se dieron otro beso, mientras tanto, Karic quitaba su espada de su
cintura en la cual, se la clavo a Jisin en su espalda, esta lo miro con
amor y dolor, se siguieron besando y el
hechicero, mientras iba bebiendo la sangre que salía por la boca de la princesa,
que de apoco iba quedando con menos fuerzas y su piel se iba poniendo blanca y
fría…
Con dolor Karic corrió por el castillo de su padre hacia
la salida, siguió corriendo, no le importaba a donde se dirigía, no le
importaba nada, por primera vez, sintió temor y tristeza por alguien… por
primera vez, sintió amor ese día.
Esta es una novela que estaba escribiendo hace un par de años atras.. nunca la termine, pero tengo pensado seguirla, esta todo en mi mente.